martes, 30 de junio de 2015

Plegaria de sanacion

Todos buscamos en un momento concreto de nuestras vidas la forma de canalizar o focalizar una ayuda en nuestros asuntos, especialmente cuando se trata de nuestra salud. En nuestra desesperación cometemos errores y acudimos dando palos de ciego a muchos itinerarios que, apartados de la Luz, nos contaminan y nos ciegan aún más. No hay que tener miedo a la enfermedad, porque contamos con muchas herramientas para hacerle frente desde la consciencia y el reconocimiento de lo que viene a marcarnos.
Ante un diagnóstico y seguimiento médico, no debemos desistir y podemos con nuestro trabajo potenciar la recuperación y mejorar las condiciones para encontrar alivio y armonía.
Podemos acudir, en primer lugar, a nuestra confianza y a nuestra fe en la capacidad sanadora de nuestro propio cuerpo. Hay muchas cosas que podemos comenzar a hacer que seguramente hemos mantenido en segundo plano hasta ese momento: buscar entornos saludables, donde estemos relajados y en armonía; apartarnos de las discusiones; centrar nuestra atención en las cosas importantes y en nuestro bienestar; RESPIRAR DE FORMA CONSCIENTE; beber agua...
Si ponemos la intención en nuestras acciones, tomarán de forma casi mágica un matiz diferente y sentiremos una nueva energía vibrando dentro de nosotros...
Ser conscientes de nuestro propio poder, la energía que repara cada una de las conexiones dañadas y visualizar mentalmente cómo reparamos nosotros mismos en cada ejercicio de meditación esos daños aportando la luz que necesitan, desenredando y limpiando las marañas que bloquean la circulación de la energía y la vida en nuestro cuerpo...
Pidamos a modo de plegaria de sanación que sean nuestros esfuerzos conscientes la mejor medicina para nuestros males. Y creamos firmemente en que todo lo que hagamos trabajando para ello servirá. Así es, así será, hecho está-

No hay comentarios:

Publicar un comentario